Desde primeros del siglo XVII los carmelitas descalzos preparan, a partir de esta planta, la famosa "agua del Carmen", que ha sido remedio popular contra desfallecimientos, síncopes y crisis nerviosas.
Propiedades e indicaciones
Las hojas y las flores de la melisa contienen un 0,25% de aceite esencial, rico en los aldehídos citral y citronelal, a los que debe su acción antiespasmódica, sedante, carminativa, digestiva y antiséptica.
El efecto sedante de la melisa la convierte en un buen remedio para las cardiopatías de origen nervioso. Está indicado para las personas nerviosas que no pueden absorber el exceso de estímulos que le llegan desde el exterior y que tampoco logran encontrar reposo durante la noche, que pasan muchas horas en la cama sin conciliar el sueño, pudiendo volver a la normalidad mediante una cura con té de esta planta
Es útil en los siguientes casos
• Problemas nerviosos: excitación, ansiedad, cefalea tensional (dolores de cabeza de origen nervioso).
• Estrés y depresión: Está muy indicada en los casos de estrés y depresión nerviosa, por su efecto sedante suave y equilibrador del sistema nervioso.
• Insomnio: Tomada por la noche, ayuda a vencerlo.
• Dolores menstruales: Desde hace siglos, se recomienda para aliviarlos.
• Y también puede ser de utilidad en caso de palpitaciones, espasmos y cólicos abdominales, flatulencia, mareos y vómitos
• Externamente es antiséptica, antifúngica (contra los hongos de la piel), antivírica de acción demostrada contra los virus del herpes y los mixovirus del grupo 2.
Sinonimia hispánica
Toronjil, cedrón, abejera, hoja de limón, cidronela, citraria.
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